Inicio de la Cuaresma.
Seguí Informa estuvo dialogando sobre esta fecha tan importante para la Iglesia como así para los cristianos con el Padre Coco Gaitán. En sus palabras el Sacerdote nos comentaba que; es un tiempo de gracias para nosotros los Cristianos, ya que como dice el Papa Francisco; Jesús sale a encuentro de nosotros en las Pascuas, que la misma es una fiesta central y esencial en nuestras vidas, por eso la Iglesia como Madre para celebrar este acontecimiento nos regala este tiempo de cuaresma la cual son 40 días antes de las Pascuas, que se deben vivir de una manera especial, preparar el corazón para celebrar ese gran acontecimiento de fe donde Jesús va a dar la vida por nosotros y donde nos va a comunicar también la vida nueva, por eso nuestra madre la Iglesia nos invita todo este tiempo a la preparación a través de la oración, del ayuno y de la limosna.
La oración porque debe ser un tiempo de mucho dialogo con el Señor, de mucha intensidad, siguiendo el ejemplo de Jesús que durante 40 días se fue al desierto, no para aislarse, sino para entrar en comunión con el Padre, por eso para Jesús estos días fueron de oración; lo mismo debe ser para el cristiano un tiempo fuerte de oración, de ayuno para descubrir que el hombre no solo vive de pan sino de toda palabra que sale de la boca del Señor, vivimos en un mundo muy superficial que nos ata a lo efímero, que nos esclaviza en el consumismo, el Señor nos invita así al ayuno, a descubrir que nuestro corazón está hecho para Él, que no hay que preocuparse tanto por las cosas materiales y descuidar al Señor, el ayuno tiene este sentido de centrar nuestras vidas en Jesús.
Y en tercer lugar, la limosna, para salir al encuentro del que está necesitado, fundamentalmente tiene que ser un tiempo fuerte de saber compartir los bienes que yo tengo, por eso el Evangelio tiene que llevar también bienes, tengo que ser generoso. Si en esta cuaresma soy egoísta, es porque aún no estoy viviendo bien este tiempo de gracia.
El papa nos invita a renovar la fe en este tiempo de cuaresma, donde nos dice que al ver prosperar la maldad, se enfriara el amor en la mayoría; por eso tomando el Evangelio de San Marcos, al final del mismo dice esta frase; que nos invita a renovar.
En el mundo siempre hay maldad, pero esa maldad no debe frenar mi caridad, sino que al contrario yo tengo que renovar mi fe en Jesús, para que la maldad no gane mi corazón, por eso el tiempo de cuaresma nos invita a rasgar las vestiduras del corazón, no las vestiduras sino el corazón, que significa tener un tiempo más para Dios, para el hermano, para renovar mi amor, mi caridad.