El presidente le solicitó al ministro de Desarrollo Productivo que dé un paso al costado. La vicepresidenta lo acusó de operar en su contra con un duro mensaje en Twitter.
Con el correr de los minutos se confirmó que Alberto finalmente usó la lapicera, como le pidió Cristina en el acto de Tecnópolis, y le pidió la renuncia a Kulfas, quien está enfrentado con la vicepresidenta desde hace un tiempo importante.
Este gesto representa un fuerte respaldo a para Cristina en medio de rumores de internas y un claro mensaje de unión y fortaleza para la oposición y el propio Frente de Todos.