Mantener la vigilancia sanitaria y los cuidados preventivos en los apiarios resguardan la producción apícola argentina. La recomendación de Senasa viene a cuento de la plena vigencia de la alerta sanitaria nacional declarada por la presencia del Pequeño escarabajo de las colmenas (PEC) en países limítrofes.
Dicha medida, que fue dispuesta en 2016 mediante la Resolución 302, se mantiene en la actualidad por el alto riesgo sanitario que implica la presencia de esa plaga en Brasil, Bolivia y Paraguay, dado que su introducción a nuestro país –que ocupa un rol preponderante en el mundo como exportador de miel— podría ocasionar graves daños productivos y comerciales a la cadena apícola.
Además de trabajar con el sector privado para mantener a la Argentina como país libre del PEC, el Senasa controla en los puestos de frontera que los viajeros no ingresen miel y/o productos apícolas, como propóleo, material apícola vivo, abejas reinas -que se transportan con las abejas obreras acompañantes en cajas relativamente chicas-, sin autorización sanitaria oficial. Ante la detección de un producto de ingreso restringido, los agentes del organismo deben decomisar la mercadería, labrar un acta y destruirla en presencia del usuario.
Por su importancia en la cadena productiva y en el marco de la alerta sanitaria, cualquier sospecha de presencia del PEC debe ser notificada de forma inmediata y obligatoriamente al Senasa, a través de: WhatsApp al (11) 5700 5704; por correo electrónico a notificaciones@senasa.gob.ar; con el formulario web Avisá al Senasa; de manera presencial o telefónica, en la oficina del organismo más cercana.