El “Apagón docente” interrumpirá el dictado de clases durante esta semana contra la Ley de Emergencia Solidaria.
Los maestros estatales nucleados en AGMER realizarán un apagón virtual -que consiste en la interrupción del dictado de clases vía internet o cualquier otra metodología- los días miércoles, jueves y viernes de esta semana.
La medida fue resuelta en protesta por el proyecto de ley de Emergencia que tratará la Legislatura el miércoles. Exigieron al gobierno provincial que grave a los sectores concentrados y redefina el rol del Agente Financiero.
El plenario de secretarios generales de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER), que sesionó este lunes en forma virtual, manifestó “su total y absoluto rechazo” al proyecto de Ley de Emergencia Solidaria anunciado por el gobernador Gustavo Bordet el viernes, al que calificó de “regresivo y confiscatorio”.
El gremio de docentes estatales se declaró en “alerta permanente”, y demandó a la Legislatura que “se abstengan de aprobar este proyecto de ley que atenta contra derechos históricos conquistados por la clase trabajadora”.
untualmente, rechazaron “los artículos 4, 5 y 6” de la iniciativa y pidieron su derogación “por dos motivos centrales: el primero porque significa llanamente un saqueo al bolsillo de los trabajadores activos y jubilados. El segundo es que observamos la existencia de sectores económicos que no están dispuestos a hacer ningún esfuerzo, mucho menos “solidario”. Y eso no es, en absoluto, justicia social; es mezquindad”, cuestionaron.
Consideraron que “la definición de ‘aporte solidario’ planteado en el proyecto del Ejecutivo conducido por el gobernador Bordet es absolutamente falaz”, ya que “las y los trabajadores de esta provincia ya hemos puesto lo suficiente en esta crisis”.
De este modo, los docentes estatales rechazaron “el aumento de los aportes previsionales personales” y “la actitud velada de modificar el 82% móvil”, a la par que remarcaron que tal como está planteado, el proyecto de ley “carece de cualquier pretensión ‘progresista’”.
“Para las y los trabajadores el aumento de los aportes personales es una medida regresiva. Ya lo hemos manifestado reiteradamente: es salario, no es ganancia”, insistieron.
En otro párrafo del documento que firman todas las seccionales del gremio, alertaron que “estos aportes que nos quieren imponer no irían a financiar nuestra Caja de Jubilaciones”. Por el contrario, entendieron que “teniendo en cuenta las declaraciones que ha hecho públicas el gobierno provincial, ese dinero se destinará a aportes coparticipables con los municipios de la provincia, o sea que los descuentos que recibiríamos los trabajadores, pasarán a engrosar las Rentas Generales de la provincia, en vez de ir a su lugar legítimo que es nuestra Caja previsional, a la vez que declaramos que el supuesto déficit de la Caja no los generamos los trabajadores y tampoco lo debemos pagar nosotros; mucho menos los compañeros jubilados. Esto se suma al atropello y manoseo por parte del gobierno cuando se nos instaló por fuerza de Ley el impuesto a las ganancias a la clase trabajadora”, lanzaron.
Tras enumerar las acciones realizadas por los docentes en el actual contexto de aislamiento, y recordar que “esta organización sindical ha venido acompañando y ayudando de distintas formas frente al avance de la pandemia, en los comedores y merenderos, brindando nuestras instalaciones como lugar de resguardo y aislamiento, en la provisión de insumos para elementos de prevención”, afirmaron que “es hora de que el esfuerzo solidario lo hagan los sectores concentrados de la economía que sistemáticamente vienen escapándose del esfuerzo contributivo”.
En esa línea sostuvieron que el proyecto “debe profundizar la dirección que apenas ensaya en los artículos 7, 8 y 9 donde incrementa los gravámenes de las entidades financieras, el comercio mayorista de medicamentos para uso humano, y el impuesto inmobiliario anual a las superficies iguales o superiores a 1000 hectáreas”.
“Consideramos que estos son los sectores, entre otros, que hoy deben ser solidarios frente a la crisis provocada por la pandemia”, dijeron, y exigieron que “además de avanzar decididamente con el impuesto a las grandes fortunas, redefinir el rol del agente financiero de la Provincia, en función de asistir y promover las actividades económicas de interés para el desarrollo productivo regional, del incremento en las alícuotas del impuesto a los ingresos brutos a las entidades financieras impidiendo el encarecimiento del crédito, y rever el esquema tributario en cuanto al Impuesto Inmobiliario Rural, desalentando la especulación y la existencia de latifundios, señalamos que otro de los sectores económicos a revisar con acuerdo de los intereses provinciales son las actividades de la minería, cuyos mecanismos de asignación de concesiones, permisos de extracción, control de la actividad y su tributación, debe ser observada teniendo en cuenta la irreversibilidad del proceso extractivo y sus consecuencias”.
Por otra parte, recordaron que “en Entre Ríos el avance de la pandemia nos encontró con una discusión salarial no resuelta y una paritaria abierta”, y agregaron que “gran parte de nuestro salario se encuentra por debajo de la línea de pobreza, mientras que el encarecimiento del costo de vida se hace cada vez más difícil de afrontar”.
Finalmente, resolvieron constituirse en “alerta permanente”, y advirtieron “es hora de que los costos de esta crisis la paguen los capitales concentrados de la economía, verdaderos responsables de las angustias del pueblo”.