El presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y titular del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), José Martins, llamó a los sectores que integran la cadena a correrse de la grieta y transitar un camino “dejado de lado los extremos”. Frente a las decisiones del gobierno, como fue el caso del cierre de las exportaciones cárnicas, “el gran desafío es ser capaces de generar enojo, pero también dejar la puerta abierta para la negociación”, planteó.
“Tenemos que ser capaces de deponer egoísmos, temas sectoriales y construir con una altura tal que podamos deponer las tensiones en la cadena comercial”, agregó.
En el marco del seminario Acsoja 2021, el directivo planteó que el CAA “no es una entidad gremial y no está para competir con la mesa de enlace, ni con las instituciones que representan al sector”, sino que busca articular un espacio para “proponer en conjunto políticas de Estado”, ya que “siempre fuimos convidados de piedra para que se nos comuniquen las decisiones”.
En ese marco, aunque evitó referencias explícitas, Martins instó a evitar la confrontación y el quiebre del diálogo. “Tenemos que convencer no solo a este gobierno, sino a todos y no se pude tener una visión sesgada”, dijo. “Hoy nos toca lidiar con una coalición política donde hay sectores más o menos afines, para recibir propuestas, pero los gobiernos anteriores también tuvieron una actitud que no fue del todo benévola con la agroindustria”, aseguró.
“Los extremos y la ideología no se pueden poner en el medio del bien común”, aseveró y dijo que el desafío es “mostrar la relevancia del sector” para la economía argentina, ya que “es el que aporta 8 de cada 10 dólares que ingresan al país” y genera “3,7 millones de empleos” en su conjunto.
En el caso puntual de la cadena de la soja, eje del debate en el seminario Acsoja 2021, Martins indicó que hay un nivel de capacidad instalada para “crecer fuerte”.
“Trabajamos al 60% de nuestra capacidad y hay que lograr transmitirle al gobierno que sólo con pequeñas cosas habrá estímulos para crecer”, dijo en referencia a la estabilidad macroeconómica y una reducción progresiva de la carga tributaria. “Sabemos que no podemos ir a cero por la situación del país, pero con un marco de estabilidad y una ley que estimule las inversiones, permitirá retomar la senda del crecimiento de la cosecha y no seguir cayendo”, indicó.
Hay una oportunidad de llegar a 100 mil millones de dólares de exportaciones”, planteó Martins y señaló que si eso ocurre derramará en las economías del interior y con la carga tributaria que tiene el sector, también a las arcas públicas. “Pero fundamentalmente el gran desafío es ser capaces de crear trabajos de calidad para ayudar a muchos argentinos que vinieron al Conurbano en busca de soluciones que no aparecieron y están hundidos en la miseria”, concluyó.