El director de uno de los observatorios nacionales de Estados Unidos expresó que la búsqueda de vida inteligente en otras partes del universo debe tomarse más en serio.
La búsqueda de inteligencia extraterrestre (SETI, por sus inglés) marca un cambio radical en las actitudes hacia un campo considerado hasta hace muy poco como ciencia marginal.
En una reunión de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia en Seattle, el director del Observatorio Nacional de Radioastronomía de EE. UU. en Charlottesville, Anthony Beasley, dijo que había “llegado la hora de que SETI salga de la sombra y se integre adecuadamente a todas las demás áreas de la astronomía”.
Beasley hizo estas declaraciones en momentos en que uno de los financiadores del sector privado de la investigación de SETI anunció que el observatorio Very Large Array (VLA) en Nuevo México se unirá a los esfuerzos para detectar signos de vida inteligente en otros mundos.
En opinión de Andrew Siemion, director de la iniciativa científica Breakthrough Listen de la Universidad de California, en el Centro de Investigación SETI de Berkeley, la incorporación del VLA aumentará las posibilidades de encontrar vida inteligente en “10 o incluso 100 veces”.
“Ahora estamos listos para hacer el sondeo más completo de todo el cielo (para buscar inteligencia extraterrestre) que nunca antes se haya hecho”, detalló Siemion a la BBC.
“Nos gustaría ver a un SETI transformado, que pasa de ser un pequeño grupo de científicos e ingenieros en California, aislado de la academia, a uno que es parte integral de la astronomía y la astrofísica como cualquier otro campo de investigación”, agregó.
Breakthrough Listen es un proyecto financiado con fondos privados para buscar comunicaciones extraterrestres inteligentes en todo el universo. El proyecto comenzó en 2016 y fue financiado por el multimillonario Yuri Milner con una suma de US$100 millones.
Lord Rees, astrónomo real de Reino Unido, dirige la organización y expresó que “me sentiría mucho más seguro defendiendo el caso de SETI, que el de un acelerador de partículas”, dijo a la BBC.
“Las búsquedas de SETI valen la pena, a pesar de las pocas probabilidades de éxito, porque hay mucho en juego”, especificó.
La NASA financió en el pasado la búsqueda de inteligencia extraterrestre pero el financiamiento se cortó en 1993, después de que senador Richard Bryan introdujera una nueva legislación, porque creía que esto era un desperdicio de dinero.
Desde ese momento, no ha habido una financiación pública significativa para SETI en EE. UU. ni en ningún otro lugar del mundo.
Según Siemion, fue el descubrimiento de los nuevos planetas lo que ha persuadido a muchos científicos respetables de que la búsqueda de vida inteligente en otros mundos debería ser tomada más seriamente.
“Desde que los seres humanos han mirado el cielo nocturno se han preguntado ‘¿hay alguien ahí afuera?’ Ahora tenemos la capacidad de responder a esa pregunta, y tal vez de hacer un descubrimiento que se consideraría como el descubrimiento científico más profundo en la historia de la humanidad “, sentenció.