Juntos, siguen afianzado una relación de las que casi no existen, de las que quedan pocas. Sin esconder nada, Cathy comparte el método de su éxito. “Ova es la parte favorita de mi vida. Nos elegimos cada mañana y sé que es el hombre de mi vida, el que me dio esta familia hermosa que construimos juntos. Ellos, además, son mi hogar y mis personas favoritas. Son los que hacen que todo valga la pena. Los cuatro somos un gran equipo”.
Tirados en la arena, con sus cuerpos bronceados, tomaron sol y se dieron algún que otro chapuzón. El descanso seguirá por algunos días más y luego volverán al país para encarar el año con las pilas recargadas. A Fulop le llegaron diferentes propuestas de trabajo que le permitirán volver al ruedo.