La Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI) difundió una carta abierta a la sociedad en la que advirtió que “el sistema de salud está al borde del colapso”, horas antes de que el presidente Alberto Fernández recibiera a representantes del sector. “Sentimos que estamos perdiendo la batalla”, alertaron.
“Los médicos, enfermeros, kinesiólogos, y otros miembros de la comunidad de la terapia intensiva sentimos que los recursos para salvar a los pacientes con coronavirus se están agotando. La mayoría de Unidades de Terapias Intensivas del país se encuentran con un altísimo nivel de ocupación. Los recursos físicos y tecnológicos como las camas con respiradores son cada vez más escasos”, indican en la carta que lleva la firma de la presidenta de SATI, Rosa Reina, y del vicepresidente, Guillermo Chiappero.
Además, en la misiva advierten que “la cuestión principal, sin embargo, es la escasez de los trabajadores de la terapia intensiva, que a diferencia de las camas y los respiradores, no pueden multiplicarse. Los intensivistas, que ya éramos pocos antes de la pandemia, hoy nos encontramos al límite de nuestras fuerzas, raleados por la enfermedad, exhaustos por el trabajo continuo e intenso, atendiendo cada vez más pacientes”.
También, los profesionales de terapia intensiva comentaron sobre las extenuantes jornadas laborales y los bajos ingresos que perciben: “Por horas y horas de trabajo estresante, agotador, pese a ser profesionales altamente calificados y entrenados, ganamos sueldos increíblemente bajos”.