El Ejecutivo sólo actualizará en junio 3,9% su valor, cuando el ajuste debería haber sido de 11,8% por litro, informó el Palacio de Hacienda.
Para evitar una mayor presión inflacionaria y en medio del proceso electoral, el Gobierno decidió hoy postergar parte del aumento del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) que tenía que empezar a regir en julio y ahora las petroleras analizarán la posibilidad de bajar precios de naftas y gasoil.
Las empresas expendedoras estaban esperando esta decisión oficial para debatir si durante el fin de semana pueden recortar los precios en función del “veranito cambiario” que mantiene estable al dólar y el valor del petróleo crudo.
Según informó la Secretaría de Energía, el ICL solo actualizará su valor un 3,9%, cuando el ajuste debería haber sido del 11,8% por litro. Por esa reducción el impuesto pasará de $6,13 a $6,37 por litro de gasoil (debería haber pasado a $6,85), y de $9,94 a $10,33 por litro de nafta (debería haber subido a $11,11).
Para apuntalar el leve repunte del consumo, el Gobierno viene tomando una serie de decisiones destinadas a frenar la escalada de precios. En ese marco, además de postergar la suba en el gravamen a los combustibles, en los últimos días la administración macrista postergó incrementos en las boletas de gas y relanzó el plan Ahora 12.
El impuesto a los combustibles se aplica de forma trimestral y hubiese correspondido imponerlo a inicios de junio pero el Ministerio de Hacienda decidió en ese momento postergar su implementación por un mes para morigerar el impacto en los precios.
A su vez, las petroleras aguardaban el anuncio oficial para poder definir la estrategia de precios en surtidores que aplicarán a partir de este fin de semana, en momentos en que se mantiene estable, con tendencia a la baja, la paridad cambiaria y el barril de petróleo Brent.
En junio, con la postergación del impuesto, las petroleras que controlan casi el 90% del mercado: YPF, Axion y Shell, incrementaron en promedio 1,5% los precios de su variedad de productos de nafta y gasoil. En la Ciudad de Buenos Aires la nafta súper cuesta $42,64 promedio por litro, la nafta $49,20 y el diesel $40,24.