La entidad aceptó la propuesta del diputado Néstor Loggio, quien pidió repensar la cuestión fiscal. “No tenemos ningún problema en discutir, con quien quiera hacerlo, pero siempre con los números en la mano, y teniendo en cuenta todos los impuestos y no sólo el Inmobiliario Rural”, señaló Alfredo Bel, uno de los referentes de la FAA en Entre Ríos.
Néstor Loggio, el diputado concordiense, encendió la llama de la polémica luego de que propusiera repensar el sistema impositivo a nivel nacional, provincial y municipal, aunque su intención central, evidentemente, está puesta en los gravámenes entrerrianos, y, sobre todo, en el Impuesto Inmobiliario Rural (IIR). El legislador, concretamente, hizo eje en la necesidad de que quienes más tienen más paguen.
Para argumentar sus afirmaciones, Loggio dijo que en la actualidad “los números demuestran que se recauda más por el (Impuesto Inmobiliario) urbano que por el (Impuesto Inmobiliario) rural”. Y fue al grano: hay que actualizar las alícuotas del IIR.
En el sector agropecuario, obviamente, la primera lectura ante la propuesta de Loggio fue “otra vez nos quieren aumentar los impuestos”.
Luciano Olivera, el secretario de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), fue el primero en salir a cruzar al legislador oficialista. “El relato elaborado por Loggio es falaz y tendencioso contra el campo y eso muestra dos alternativas: miente descaradamente o es un ignorante, y los dos hechos son graves. Este señor, que estuvo aplaudiendo las tomas de Grabois en Entre Ríos, debiera presentar proyectos para que la Legislatura que integra les cueste menos a los contribuyentes. Hoy la política le sale millones a los entrerrianos, evitando que esos recursos se vuelquen en obras o en mejores salarios para docentes o el personal de la salud. Es hora de parar la fiesta de cierta casta política”, disparó el ruralista gualeyo.
La mirada de la FAA.
En la Federación Agraria Argentina (FAA), en tanto, recogieron el guante y aceptaron de buen grado la propuesta de Loggio. “Con todo gusto vamos a debatir el tema fiscal”, le dijo Alfredo Bel, uno de los principales referentes de la FAA en Entre Ríos, a DOS FLORINES porque “estamos esperando desde hace años la rediscusión de la cuestión impositiva” en la provincia.
El dirigente, sin embargo, advirtió que en cualquier “análisis serio” sobre cuánto aporta el sector agropecuario al fisco hay que hacer “una composición de todos los impuestos”, incluidos los nacionales –muchos de ellos coparticipables– y no sólo del Inmobiliario Rural.
Bel puso el acento en el Impuesto a los Ingresos Brutos que, remarcó, “no lo paga sólo el consumidor, sino también el productor, el industrial, todo el mundo. Pero mientras el comerciante, por ejemplo, lo traslada al precio, al consumidor, el productor lo paga sobre su facturación bruta”.
El efecto cascada de Ingresos Brutos sobre la renta de una actividad productiva “es enorme”, se quejó el federado, pero, además, “pagamos impuestos por la electricidad, pagamos Sellos –son miles y miles de pesos los que se pagan en ese impuesto retrógrado–, pagamos las patentes”.
En la Federación Agraria “no tenemos ningún problema en discutir el tema fiscal, con quien quiera, pero siempre con los números en la mano, y teniendo en cuenta todos los impuestos –incluidos los coparticipables– y no sólo el Inmobiliario Rural que es el más progresivo del país”, cerró Bel. Danilo Lima