La OMS informó que de acuerdo a los datos de Gisaid (sistema donde se registran las secuenciaciones genómicas a nivel mundial) y los informes de las oficinas regionales y de los países, “la cantidad de casos y la cantidad de países que informan la detección de estas tres variantes están aumentando”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) incorporó recientemente tres sublinajes nuevos de la variante Ómicron de coronavirus a la lista de preocupación ya existente, y señaló que si bien en los países que las reportaron los casos aumentaron, por el momento no hubo incremento de “hospitalizaciones u otros signos de gravedad”.
“Tres sublinajes BA.4, BA.5 y BA.2.12.1 de Ómicron han adquirido algunas mutaciones adicionales que pueden afectar sus características”, indicó el organismo al actualizar la lista de variantes de preocupación.
Hasta el momento “hay muy pocos datos sobre estas subvariantes, por lo que es poco lo que se puede decir; sí sabemos que se está estudiando y siguiendo”, indicó el investigador Humberto Debat, virólogo e integrante del Proyecto Argentino Interinstitucional de Genómica de SARS-CoV-2 (PAIS).
“La información preliminar que tenemos está basada en tres reportes de muy reciente publicación que sugieren que BA.4 y BA.5 son consideradas de mayor transmisibilidad que BA.2 y esto sería lo que estaría justificando su aumento de frecuencia en Sudáfrica”, agregó.
En relación al nivel del escape inmune, Debat indicó que “lo que se vio es que estas dos subvariantes tienen la capacidad de quebrar la inmunidad natural con BA.1 que fue la que impulsó la gran ola de Ómicron que se dio a nivel global; además se vio que estas subvariantes BA.4 y BA.5 tuvieron un escape a una serie de anticuerpos monoclonales”.
El especialista señaló que “estas subvariantes indican que Ómicron siguió circulando y eso favoreció su evolución y la generación de nuevas versiones con gran capacidad de evasión inmune, lo que abre la puerta a un escenario en el que se quiebre la inmunidad generada por infecciones previas y por vacunas desarrolladas a partir de la variante BA.1”.
La OMS informó que de acuerdo a los datos de Gisaid (sistema donde se registran las secuenciaciones genómicas a nivel mundial) y los informes de las oficinas regionales y de los países, “la cantidad de casos y la cantidad de países que informan la detección de estas tres variantes están aumentando”.
No obstante, aclaró que “la evidencia limitada hasta la fecha no indica un incremento en los ingresos hospitalarios u otros signos de mayor gravedad”.
“La OMS continúa monitoreando de cerca las variantes BA.4, BA.5 y BA.2.12.1 como parte de Ómicron VOC y proporciona más actualizaciones a medida que se dispone de más evidencia sobre la gravedad”, indicó el documento.
Además, solicitó a los países que “sigan atentos, que monitoreen y reporten secuencias” y que “realicen análisis independientes y comparativos de las distintas variantes emergentes”.