El ente sanitario entrerriano acusó al organismo nacional de haber bloqueado la posibilidad de la carga de las actas de vacunación y el consiguiente movimiento de animales. El Senasa, sin embargo, dijo que el problema lo generó el incumplimiento de veterinarios privados al no reacreditarse en los programas sanitarios del organismo.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) informó que resolvió los inconvenientes suscitados en nuestra provincia por el incumplimiento en la reacreditación en sus programas sanitarios de los veterinarios privados.
Ahora, señaló el organismo nacional en un comunicado, los veterinarios privados de Entre Ríos tendrán 30 días para completar su reacreditación en los programas sanitarios. En caso de incumplimiento, serán dados de baja definitivamente del sistema.
La Fundación para la Lucha contra la Fiebre Aftosa (Fucofa) había informado a los productores ganaderos entrerrianos que, por decisión del Senasa, desde las primeras horas de este lunes se había bloqueado la posibilidad de la carga de las actas de vacunación, trámite imprescindible para que los productores puedan tramitar los DTE que permiten amparar los traslados de vacunos, con todo tipo de destino.
El Consejo de Administración de la Fucofa, asimismo, señaló que se dirigió a los responsables del Senasa para que procedieran a la urgente normalización del sistema, dado que “innumerables productores se ven afectados en su operatoria normal, tanto para realizar traslados entre establecimientos de un mismo propietario, como con destino a ventas o remates feria”.
El Senasa, sin embargo, sostuvo que no ha sido responsabilidad suya, como indicó la Fucofa que lo había acusado de generar el bloqueo de movimientos cuando en realidad “la situación fue causada por la no reacreditación de los veterinarios privados de la provincia en el tiempo que se les otorgó –incluso con tres prórrogas– y que fuera informado en reiteradas oportunidades y con la debida antelación”.
El procedimiento único de registro para veterinarios y técnicos acreditados, entre ellos los vacunadores, recordó el Senasa, “está normado por la Resolución 1/2018, que establece tres años de vigencia de las acreditaciones y un plazo de un año de para reacreditarse”.
En este sentido, y si bien a partir del 1 de enero del 2019 se darían de baja todas las acreditaciones con una vigencia mayor a los cuatro años, por diferentes circunstancias, el Senasa fue prorrogando la medida, en primera instancia hasta el 2 de enero de 2020 (Resolución 255/2019), luego hasta 1 de julio de este año (Resolución 251/2020), y finalmente hasta el 1 de octubre último (Resolución 474/2020), fecha establecida previo al inicio de la segunda campaña de vacunación contra la fiebre aftosa de 2020. Dos Florines