“Para nosotros parte del desafío de la inclusión en la Argentina está y debe estar respaldado en la inclusión de las personas con discapacidad en el mercado de trabajo”, indicó.
Señaló que “a lo largo de los últimos años nos enfrentamos a la absurda contradicción de que quien tiene una pensión por discapacidad no puede acceder al mercado de trabajo porque se le suspende la pensión. De manera que un derecho protectivo que el Estado había diseñado funciona como un límite para el desarrollo de las personas con discapacidad”.
“Hemos impulsado y tomado la decisión de eliminar esa barrera, de romper esa pared que representa para las personas con discapacidad el límite entre la pensión y el trabajo. Por eso desde mañana las personas con discapacidad, beneficiarias de la pensión, que entren al mercado de trabajo no van a perder ni a ver suspendida su pensión. Muy por el contrario, van a poder integrar la pensión a su ingreso en el mercado de trabajo”, manifestó.
El objetivo “que recorremos es el de incluir, el de incorporar, el de ampliar las oportunidades de las personas con discapacidad en el ingreso al mercado de trabajo. Y sentimos que este es un primer paso en un proceso en el que además debemos consolidar ese proceso de inclusión rompiendo barreras arquitectónicas a partir de un Estado que trabaje en el diseño de ciudades inclusivas”.