Reseña histórica de Seguí
Hechos importante y pequeños hechos del cotidiano vivir constituyen la historia de los Pueblos. Héroes o simples ciudadanos con visión del porvenir son los actores principales de los acontecimientos históricos, pero en realidad lo pueblo enteros son los protagonistas.
Glorificar las hazañas de la raza o simple conocer el pasado, fundamental para mantener vivo el sentimiento del amor a la humanidad, a la patria y al pequeño rincón que nos recibió al nacer.
Seguí que poco a poco crece, trabaja y progresa. Al recordar sus comienzos vemos que toda la Entrerrianía esta presente, Urquiza, fundando estancias otorgando campos para que se poblaran con haciendas, correspondiéndole una fracción a la señora Baldomero Romero de Rosas, madre de doña Conrada Rosas de Espinosa, que fue de las fundadores de Seguí.
El general Racedo, preso de la “fiebre ferroviaria” inaugura los trabajos de construcción de Ferrocarril Central Entrerriano.
El gobernador Basabilvaso continúa su política de adelanto de los ferrocarriles y llegamos al doctor Enrique Carbo, gobernador de Entre Ríos desde 1903 a 1907. Leoncio Pianillo lo llama “el realizador”, por su obra gubernativa. Numerosas obras viales fueron proyectadas e inauguradas durante su gobierno. Su historia esta íntimamente relacionada con Seguí.
Gran amigo de Don Marcos Espinosa, acepto el ofrecimiento que este le hiciera de los campos existentes en los que hoy es Seguí, para que por allí pasara una línea férrea extendida desde Crespo a Hasenkamp.
El primer jefe fue don Manuel Hornos. Como sucedió en toda la Republica, que al lado del ferrocarril surgieron los pueblos, paso así en Seguí, y fue don Marcos Espinosa el primer poblador y tanto fundador del pueblo. Había nacido en Punta Gorda, Diamante y ya hacia varios años estaba radicado en una casa cercana a lo que es hoy la estación.
Al pasar el ferrocarril por los campos heredados por su señora, decidió trasladarse con su familia frente mismo a la estación, en la casa que hoy ocupan los herederos de don Gregorio Battisti.
Otras viviendas se levantan y tenemos como primeros pobladores a las familias Espinosa, Ortellado, Dematteis, Romero, Lanzi.
El pueblo se llamaba Pueblo Espinosa en sus primeros planos y según datos de los familiares, don Marcos Espinosa quiso que la estación llevara el nombre de un prócer. Se eligió a Juan Francisco Segui, natural de Santa Fe (1822-1863). Secretario del general Urquiza, redactor del manifiesto del 1º de Mayo de 1851, fue auditor general de guerra, convencional de 1853, legislador, Ministro de Estado, periodista, orador y poeta.
Si nos remontamos hasta la primera locomotora que corrió en el país en 1857, al inaugurarse los servicios ferroviarios, vemos que apenas a 50 años Segui tuvo su línea férrea.
El ferrocarril fue en esa apoca el mejor y mas cómodo medio de transporte dada la topografía entrerriana, con riachos y arroyos que dificultan las comunicaciones.
Fue tal la importancia que dio la estación, que en 1910 se habían construido 41 casas y toda la colonia estaban poblándose con familias italianas, rusas y alemanas, que se dedicaron especialmente a cultivar la tierra y Segui se convirtió en un gran centro cerealista.
Fueron los primeros compradores de cereales Raffo y Jaroslavsky. Eran casas de comercio importantes Juan Dematteis, Alberto Marangunich, Mateo y Antonio Santich, Bartolomé Razzeto y Listchen.
La industria le corresponde a don Hermenegildo Armando el haber instalado la primera fábrica de soda, y también una herrería.
Don Pablo García, adquirió el primer automóvil que hubo en la Villa y lo destino a servicios públicos. Un taller instalado en esas primeras épocas y que han sido una tradición honrosa de abuelos y nietos, es el de don Fortunato Bottero. En este taller se ha rendido culto al trabajo manual. Hecho a conciencia, dirigido por mentes contractivas y prácticas.
En la industria del pan se destaco como primer elaborador don Juan Lanzi, quedando luego una de sus hijas Doña Delia Lanzi de Rossi, al frente de la panadería.
La primera fonda fue de un señor Jiménez, pero en 1914 el señor Francisco Cargnel instalo un hotel muy cómodo y con un servicio perfecto, según se recuerda. Tiene extraordinaria importancia porque se constituyo en centro de las reuniones sociales. En sus salones se rememoraban las tertulias del Buenos Aires colonial, ya que en los bailes se servían siempre chocolate y masas.
La suave cadencia del vals, el ritmo colorido y ágil de la polea de la mazurca se mezclaban este ambiente de cordialidad. Ahí mismo funciono un club, el que se llamo “Cosmopolita” y que fue centro de cultura al ofrecer los servicios de su biblioteca.
Entre los primeros servicios públicos se encuentra el telégrafo, el primer telegrafista fue don Samuel Romero.
El correo, primero fue una Estafeta que funcionó en la casa de Marangunich. El estafetero era don Antonio Santich.
El primer comisario fue don Faustino Rodríguez.
Casi simultáneamente con la fundación del pueblo, fue la fundación de la escuela, y se recuerda como primer maestro a Simeón Ramírez.
En 1913 llego a establecerse con farmacia don Francisco Sarache, donde presto incalculables servicios, porque debió hacer las veces de medico y salvar numerosas vidas. Lugo vino a establecerse el doctor Guillermo Morh.
El primer deporte que se practicó fue la pelota a paleta. En varias casas de comercio se practicaba el juego de las bochas. Surge por ultimo el deporte popular, el fútbol; Natalio Díaz, Concepción Rosas, León Atias y Federico Folgado, se cuentan entre los iniciadores de Seguí Foot-Ball Club. Luego siguieron Alumni y Belgrano, diremos que primero surgieron clubes de barrio formados por niños y jovencitos.
Sportivo, fundado por Víctor Espinosa y Juan Aguiar; fue el primer club que uso camiseta; y recuerda aun los colores: rojo y verde en tres franjas anchas. Mitre, organizado por Felipe y Antonio Cargnel; Sarmiento, fundado por Pablo Battisti. Sus jugadores usaban camisa blanca y sobre ella una banda con una “M” o “S”. Todos ocupaban la misma cancha frente al molino de la estación y estaba ubicada de Este a Oeste. De este semillero nació “Alumni” en 1921; Antonio Cargnel, Alejandro Noro, Juan y Santiago Hoffman, Pedro Erbetta, Abel Bobrosky , Pablo Battisti, Dalmacio Baldasar y Carmelo Solari, se cuentan entre los organizadores y jugadores que se recuerdan.
En la parroquia el Padre Enrique Moeller había formado el club “Patronato”; don Jaime Kitroser y su hijo Buko, en su negocio propiciaron la formación del club “Belgrano”.
En 1933 los clubes se unieron y surgió el actual “Seguí Fot. Ball Club”; como organizadores se recuerdan, entre otros, a Alejandro Noro, Pablo Battisti, los Hnos. Cargnel, los Hnos. Hoffman, Dalmacio Baltasar, Juan Céspedes, Federico Folgado, Pedro Erbetta, Constancio Vega, E. Natalio Díaz. Seguí ha sido un club que ha prestigiado al pueblo, porque sus jugadores han penetrado a la cancha dispuestos a triunfar y los trofeos ganados lo confirman.
Más o menos en 1920 los negocios importantes pertenecían a Jaime Nadera, Adolfo Sonis, Santiago Bottero, Leon Atias, Dalmacio Baldasar, Adolfo Braustein, León Brodcky en lo que había sido Jarolosky, Brodsky y don Santiago Battisti dedicado a la fabricación de embutidos. En épocas posteriores se instalo con panadería Batagliero, Milone y Jaime Suñe y con fábrica de soda Branco Matijevich. Otros negocios que reformaron los ya existentes o continuaron en progreso fueron los de Nicolas Mattar, Piseck Hnos. Isaac Kellner, Simón Libedinsky, Juan Destefani, Moisés Spestor, Sebastián Pereyra; Benjamín Beber y Enrique Tolcachier. Enrique Tolcachier vino a Seguí en 1915 y trabajó en lo de Brodscky. En 1924 se inicio con almacén y acopios de aves y huevos, anexados luego tiendas y ramos generales. Fue ayudante de Y.P.F. y su negocio fue uno de los más importantes del pueblo.
De 1920 a 1921 se fundo un molino harinero llamado “San Lorenzo”, se asociaron Chiardola, Bottero, Cogno, Beber, Masine, Lanzi, Bolzan, Cargnel, para explotarlo.
El primer carpintero que se mantuvo por muchos años trabajando en Seguí, fue don José Flores.
Los médicos de esta época eran los dotores Elías M. Seré Y José Maria Uzin; varios años estuvieron instalados en el pueblo, ofreciendo sus servicios profesionales. La señora Elvira de Seré se desempeño como dentista.
Entre los servicios públicos se destaca la Usina de Félix Cuco, luego de los Hnos. Stiben.
El correo de 1927, tuvo como primer jefe a Juan Adolfo de la Peña y primer cartero a José Díaz, que anteriormente era encargado de Estafeta.
La compañía de Teléfonos “La Entrerriana”, tendió sus líneas aproximadamente en 1931, la primera telefonista fue doña Maria Ángela Spoturno.
El 21 de abril de 1929 se inauguro el nuevo edificio destinado al funcionamiento de la Escuela Nº 61, el terreno fue donado por el Señor Alberto Marangunich, era la Directora Matilde A. Urrutibehety de Díaz.
También se inauguro en estos años la nueva Capilla. En los primeros tiempos se hacían misas y se celebran bautismos en la casa de Don Marcos Espinosa, luego de don Cornelio García.
El 6 de febrero de 1921, el señor Obispo de Paraná nombra la primera Comision Pro-Templo de Estación Seguí, Presidente;: Vicente Clariá, Vice: Marcos Espinosa, Secretario: Fortunato C. Perez, Pro-Secretario: Pedro C. Garcia, Tesorero: Jose Lanzi, Pro-tesorero: Octavio Taborda, Vocales: Gilberto Díaz, Francisco Cargnel, Cornelio Garcia, Felipe Vergara, Justo Bonastt, Fausto Ortellando, Director de dicha comision y representante de la Autoridad Diocesana: Rdo. Padre Pablo Srastmann, capellán vicario de Crespo.
El 5 de febrero de 1914, se acepta la donación de dos terrenos, uno para edificación de una capilla y otro para quinta del Capellán; donantes los señores Landajo y Garayalde.
El 5 de febrero de1914, se autoriza la bendición de la piedra fundamental de la Capilla.
El 14 de Setiembre de 1921, se autoriza al Rdo. Padre Enrique Moeller a hacer las veces de párroco. El 14 de junio de 1925, bendición de la piedra fundamental de la Iglesia Parroquial en Seguí, en honor a la Virgen de la Merced.
En 1932 el Padre Enrique Moeller hizo venir a las religiosas Siervas del Espíritu Santo, para que atiendan el colegio “Santa Teresita”, Escuela Nº 19. Era Superiora la Rda. Hna. Philiberta y Directora la Rda. Hna. Ludiera, además vinieron las Hnas. Hebertina y Caritas.
Aproximadamente en 1935 se dio forma a la plaza actual en el terreno donado por Landajpo y Garayalde. Don Marcos Espinosa había donado al lado de las vías del ferrocarril un terreno para plaza y otro para edificios públicos; como el pueblo se extendía hacia el Oeste, se formo la plaza frente a la iglesia.
Por iniciativa del Comisario rural don Víctor Fenoglio, se logro la perforación del pozo semisurgente en el terreno de la plaza, se instaló completo; un caño servia a la población y otro llevaba agua al Colegio de la Hermanas.
El club “cosmopolita” el 25 de mayo de 1924 inauguro su edificio propio. Los directivos eran Francisco Sarache, Victor Fegnoglio y Guillermo Pagnone. Era el centro de las reuniones sociales, luego se dieron funciones de cine.
Aficionados al teatro, como fueron Adolfo de la Peña, Jorge Kuschich y Samuel Brodsky. Luego siguió con esta inquietud don Alejandro Noro, que recuerda que el beneficio de la primera obra que pusiera en escena fue para la donación de ropas a niños del pueblo. Asimismo varias instituciones eran beneficiadas, principalmente la Iglesia, las Escuelas y Seguí Fott Ball Club.
Se crearon la Municipalidad, el Juzgado de paz y Registro Civil, el Instituto Secundario y el Banco de Entre Rios.
Se completo la plaza actual y una comisión formada por Carlos Vicario como presidente, Natalio Diaz como Secretario y Víctor Fegnoglio como tesorero, iniciaron una colecta popular y erigieron el mástil. Según consta en libros el pueblo respondió satisfactoriamente.
MUNICIPALIDAD:
La población fue declarada Municipio de 2da. Categoría por Decreto Nº 22 M.G del 8 de Enero de 1948. De la elección realizada el día 7 de marzo de, surgieron sus primeras autoridades, quienes asumieron sus cargos el día 1º de Mayo del mismo año y fueron las siguientes: Presidente: Gregorio Battisti; vicepresidente: Dalmacio Baltasar; vocales: Moisés Furman, Carlos Sauthier, Juan Sacks, Antonio Cargnel y Juan Kemerer. Entre la primeras obras realizadas se cuenta el matadero municipal, que tiene un galpón de faena, casa-habitación para el cuidador, y corrales, lotes para siembra de forrajes y mantenimiento de animales. Un carro distribuía la carne a las distintas carnicerías. El deposito para la provisión de agua y arreglos de la plaza, con todos sus juegos infantiles y un busto al General San Martín.
ALUMBRADO PUBLICO:
En carácter de prueba, se pusieron con buen resultado se pusieron 8 lámparas mezcladoras de mercurio en la calle Sargento Cabral. Por gestión de la Municipalidad, se amplio el alumbrado publico, concretándose el cruce de las vías del F.C.G.U.
JUZGADO DE PAZ Y REGISTRO CIVIL:
El 26 de diciembre de 1955 se estableció en Seguí, esta repartición pública. En lo atinente a la justicia se comenzó a trabajar en la citada fecha y en cuanto al la actividad civil se iniciaron los trabajos en el mes de Marzo, habiendo inscripto el primer nacimiento don Abelardo Enrique Viola. El 9 de Febrero de 1956 se creo la oficina enroladora de varones y comenzó a funcionar como tal, en Mayo del mismo año, fue el primer enrolado el ciudadano Fernando Roberto Moya. El 6 de Abril de 1.956 se autorizo el funcionamiento de la oficina enroladora de mujeres, comenzando las tareas de la misma el día 23 del mismo mes y fue la primera empadronada la ciudadana Elisa Aurora Hoffman.
La primera oficina del Juzgado de Paz y Registro Civil, estaba ubicada frente a la plaza, luego donde esta el correo, después frente a la escuela Nº 61 y actualmente en calle Sargento Cabral, el juez es Rogelio Villanueva.
El primer alcalde fue don Enrique Romero que habitó la primera casa construida un Seguí, propiedad de doña Melchora Alaniz.
BANCO DE ENTRE RIOS:
Para llenar esta sentida necesidad del pueblo y de sus alrededores, vecinos con inquietud de progreso, realizaron gestiones para establecer una agencia del Banco de Entre Ríos y fueron organizadores: Manuel Zandomeni, Daniel Riffel, Manuel Bieri, Voltolini Hnos., Schiro y Lucey, Lorenzo Chiardola y Gregorio Battisti. La inauguración oficial fue en Enero de 1961. Se habilito al publicó el 30 de Enero de 1961. El primer Gerente fue el Señor Fernando Tomáis.
INSTITUTO SECUNDARIO:
Mucha veces un hecho simple o pequeño, tiene una gravitación extraordinaria en la comunidad. Tal la creación entre el Rdo. Padre Enrique Laumann, don José Villanueva, Mario Spoturno, Rogelio Villanueva, Eliseo Main y Santiago Akerman, surgió la idea del Instituto. El cura párroco deseaba que la juventud, es decir los alumnos de 6º grado, tuvieran una ocupación, aparte de las habituales del hogar, a la vez les sirviera de entrenamiento y cultura. Pensaba en formar un ateneo juvenil, cultural y deportivo. El señor Main, luego de pensar un momento dijo: ¿y por que no un Colegio Secundario? Esta idea fue aceptada y llevada de inmediato a la práctica. Posteriormente estas personas realizaron reuniones que contaron con la presencia de docentes y otras personas, entre las que recuerdan a la señora Elsa de Yugdar, Señor Alejandro Noro, señora Angélica R. de Matteoda y el Señor Andrés Kriger. El 8 de Enero de 1961 se llamo a Asamblea a autoridades civiles; A. Villanueva, Tesorero Francisco Sanero y numerosos vocales; colaboradores Otilia A. de Battisti, Rosalia Kessler, Dora H. de Bustos, Elida Suñe y Eliseo Main.
El pueblo contribuyó a la creación del Instituto, pero la construcción del edificio, el mayor aporte lo tuvo el Sacerdote de sus amigos e instituciones de Alemania. De sus aulas han surgidos maestras y peritos mercantiles, que hoy trabajan en nuestro pueblo. Otros alumnos han seguido estudios superiores.
ESCUELAS PRIMARIAS:
La dos escuelas primarias, también cumplen a conciencia sus funciones de educar. La escuela Particular Nº 19 comenzó en ese entonces a construir nuevas aulas, arreglando el patio, y galerías. En 1955 comenzaron a trabajar maestras laicas. Durante este año y bajo la dirección de la Enseñanza privada y como directota la Hna. Fridola Weyer, había logrado equiparación.
La escuela 61º, en 1963, y siendo Director el señor Eliseo Maín, inauguro la nuevas aulas, que permitió darles clases a todos los alumnos dentro del edificio, con lo cual se llano una urgente necesidad. Cuenta con una valiosa biblioteca que lleva el nombre “Mariano Moreno”. La misma cumple una función cultural muy necesaria para la población, ya que, además de los maestros y alumnos retiran libros sus numerosos socios. Fue fundada en el año 1929, justamente en el mismo año que se construyo el edificio actual de dicha escuela.
Varias casa de comercios se instalaron en esa época, algunas con acopios de aves y huevos. De las cuales podemos nombrar Tienda de Selim Sabag, Casa Furman, Tienda “Santa Teresita” de Modesto Viola, Cooperativa Agropecuaria de Seguí Ltda. El primer Gerente fue Dalmacio Baltasar, el primer empleado fue Juan José Todone.
FUENTES DE TRABAJO:
Seguí cuenta en su planta urbana, con cuatro fabricas de alimentos balanceados. Una la de “Hijos de Daniel Riflfel”, que elabora el producto “Granovita”; bajo esta marca prepara todos los tipos de alimentos para aves ponedoras, politos y pollos. Se fabricaban alrededor de 7 mil bolsas mensuales.
En el Año 1947 se estableció en Seguí la familia Voltolini y se instalaron con fábrica en el año 1950. Se acondicionaron para producir 2 mil toneladas mensuales de alimentos, 500 toneladas de harina de alfalfa en comprimidos, que es mercadería exportable, el nombre del alimento es “Vitana”.
En el año 1958 empezó a trabajar en la fabricación de alimentos balanceados “Avicol”, firma Gregorio C. Battisti, que además tiene compra de cereales y barraca. En esta misma casa, en el año 1907, don marcos Espinosa tenía la compra de cueros y cerdas.
Una nueva fábrica de alimentos balanceados es la del Señor Otto Seiler, instalada en la calle Aconcagua. Existía también la fabrica “Norial”, con planta deshidratadora de alimentos, leche, huevos, concentrados de café, malta, yerba, etc.,
El club Atlético Cañadita Central, surgió en el año 1953 cuando se realizaron campeonatos de barrios y de la campaña. Sus organizadores fueron: Roberto Cerrudo, Evaldo y Alberto Riffel, José Rey, Julio Velásquez, Eduardo Albornoz, Juan Elsesser, Antolín e Ignacio Ríos, Máximo Muller, Raúl del Valle, Pedro Leguizamón, José Casadey y Eusebio Villanueva. Hoy el club Cañadita tiene un hermoso campo de juego. El 24 de Agosto de 1965 le fue concebida la Personería Jurídica. En el año 1954, en Seguí se reúnen los siguientes vecinos: Dr. Humberto Miraglio y señores Tomas Cavallera, Eduardo Todone, Isidro Suñe, Ruben Casabella, José Meter, Augusto Larsen, Raúl Galvan, Roberto Viola, Modesto Viola, Pedro Kaufman, Natalio Díaz, Enrique Resniky, Eduardo Maier, Olindo Rossi y David Osuna, para fundar una institución social y deportiva, y de ahí surgió esa nueva institución a la que bautizaron sus fundadores con el nombre de “Club Recreativo Belgrano”. Su primer presidente fue
Dr. Humberto Miraglio. En el año 1955 obtuvo Personería Jurídica. El principal deporte que se practica es el de las bochas y para ello tiene dos canchas cerradas y cubiertas. Durante varios años se exhibieron películas cinematográficas. Han presidido esta institución: el Dr. José Humberto Miraglio, Sr. Jorge Kuschich, Dr. Juan Carlos Sampietro, Sr. Ramón Yugdar y Marcos Kuschich.
Luego de la fundación de nuestro colegio secundario van surgiendo distintos profesionales entre ellos, las maestras: Dora Paula Treppo, Mirta Cristina Bottero, Natalia Valentina Díaz; los primeros peritos mercantiles: Zulema Leonor Espíndola, Carlos Atilio Viola, Gaspar Ambrosio Bruera, Hugo Rifel, y los hermanos Grand, estos últimos continuaron estudios superiores. Pero Seguí también tiene los profesionales que han realizado sus estudios secundarios en otros establecimientos educacionales, primeros maestros Dora Hermoso de Bustos, Noemí y Judith Díaz Urrutibety, Paulino Ríos, Lydia Kuschich. Luego Clelia, Elida y Celia Suñe, Renne Teresita Sacks de Albarenque, Rosalía Kessler de Voltolini, Maria de los Santos Vega, Delia Noemí Rossi, Cecilia Dettler y Maria de las Mercedes del Castillo de Viola. Como Bachilleres a: Nelly Kuschich, Raúl Juan José Del Castillo Magdalena Uzin, Eduardo Furman y José A. Argarate (hijo).
Como peritos mercantiles a: Ángel Atilio Masine, Omar Viola, Carlos Sacks, Maria Cristina Hermoso y Miguel Ángel Pagnone.
Entre los abogados nativos en nuestro podemos nombrar: Samuel David Tolcachier, José Valerio Díaz, José Maria Uzin (hijo), Elpidio R. Scipione e Inés Amor Pagnone.
Escribanos: Salvador Espoturno, Luis Ángel Moro y Judith Furman de Kufmnan. También cuenta con técnicos constructores y Maestro mayor de Obras: Ceferino Cargnel, Alberto Oszczypok y Reinado Vilo; con el técnico electricista: Fabio Adolfo Piseck y con un técnico en granjas: Rubén Paúl. Contamos también con hijos de esta pueblo, recibidos como oficiales de policías en la Esuela de la Provincia y son: Héctor Espinosa, Cecilio Díaz y Edgardo Molina. Con el odontólogo Rogelio Bottero, quien por mucho tiempo trabajo en nuestra Villa, viajando desde Paraná, los días sábados. Con el sacerdote Juan Kemerer y la Religiosa Maria Leonor Villanueva, llamada dentro la Congregación: Hermana Anatalia. Con el farmacéutico Juan José Sack. Aunque no es nacido en nuestro pueblo, pero como fue el primero en su profesión, nombrándose al Contador Publico don Ramón Pujol Figueras.
Como todo pueblo, necesita de los servicios del medico, tenemos que los primeros, hacían visitas periódicas desde Paraná y Crespo. El primero que se estableció fue el Dr. Guillermo Morh, que trabajo en la casa Piseck. Lugo llegaron los Doctores Elias M. Seré y José Maria Uzin, quienes estuvieron varios años instalados en el pueblo, ofreciendo sus servicios en bien de la comunidad. Mas tarde llegaron los doctores Arturo Scartascini y Julio Cesar Doyle. Luego llega, para quedarse unos cuantos años, el Dr. Jose Humberto Miraglio, quien, el 22 de Marzo de 1953, funda la Clínica Miraglio, con capacidad para enfermos, atendiendo clínica general, primeros auxilios y maternidad.
El 19 de junio de 1953, se realiza cirugías por primera vez. El 24 de marzo de 1956, inaugura su nuevo local propio, con la construcción de planta baja, adquiriéndose en Abril de 1957 el aparato del rayo X. En el año 1959, se inicia la construcción de la planta alta, que es habilitada en 1960. Todo esto, el Dr. Jose Humberto Miraglio, lo hace con la ayuda eficaz de su principal colaboradora, su señora Pilar, quienes, juntos, forman las primera enfermeras que trabajan en su clínica y atendiendo a ella a la vez a la sala de maternidad. Esas primeras enfermeras que formaron son: Maria Reyna Cargnel, Adela G. de Kloss, Elsa Díaz, Teresa Hardock, Yolanda Rosa Sosa. A partir del 4 de febrero de 1963, el Dr. Miraglio se radica en Buenos Aires, pasando a ser los propietarios de la clínica, desde ese momento, los Doctores Vicente Osvaldo Aguirre y Jorge Raúl Remonda. A partir de entonces, cambian el nombre de la Clínica Miraglio por el de Sanatorio Lister, el cual cuenta con una sala de operaciones. La idea principal de sus mediaos propietarios, era consolidar la tarea sanatorial, sobre la base de las prestaciones reales de servicios, tales como: Cirugía de todo tipo, partos, clínica medica, clínica pediátrica, trasfusiones, laboratorios, rayos y fisioterapia. En un comienzo el laboratorio, a cargo del Bioquímico Dr. Pedro Omar Savoini, funciono en el sanatorio. Es de hacer constar que la incorporación del Bioquímico a la comunidad, es de real importancia, por la valiosa cooperación que aporta los diagnósticos y las molestias que evita a los pacientes. Consultorio adelante, para aislar a los enfermos del bullicio de los pacientes. Una Sala –Administrativa, también aislada, y la formación del parque para estimulo de los convalecientes.
En el año 1913 se instalo una Biótica, así como se llamaba aquellos años a las que es hoy una Farmacia, don Francisco Sarache, debió hacer muchas veces de medico y salvar muchas vidas. Luego se instalo con farmacia Sergio Brodzky; también lo hizo Ángel Soñez, Enrique Resnisky, Hector Benito y Pedro Omar Savoini.
Como primera dentista tenemos a la Dra. Elvira Schenone de Seré, esposa del medico ya nombrado. Luego viajan periódicamente los doctores Figueroa y Rogelio Bottero. Y por ultimo se instala definitivamente, a partir de 1957, el odontólogo Dr. Juan Carlos Sampietro, quien formo su hogar aquí, uniéndose en matrimonio con una hija de don Isidro Suñe, antiguo vecino de este pueblo.
También contábamos con una sala de primeros auxilios, llamada “Coronel Guarumba”, que se fundo en 1954, siendo su medico Director Dr. Julio C. Doyle. La primera enfermera que tuvo dicha sala, fue Hilda Conde, luego Amelia Vega y a partir de 1961, la Sra. Adela Grandoli de Kloss.
Ahora luego de la reseña sobre el origen y evolución de nuestro pueblo, solo queda pedir disculpas si hemos omitido algún nombre o hemos cometido algún error, pero son tanto que posiblemente algunos han escapado a nuestra memoria y atención. Pero a la vez queremos invitar a todos los niños, jóvenes, hombres y mujeres que habitan este pueblo, nuestro pequeño y gran Seguí, trabajemos, luchemos, nos sacrifiquemos, no escatimemos esfuerzo alguno, para que nuestro pueblo progrese, para que siempre vaya hacia delante y todo lo que emprendamos, lo que hagamos juntos, unidos en toda manifestación, ya sea cultura, social, deportiva, comercial, industrial, en bien de nosotros mismos y de los que vendrán: NUESTROS HIJOS, para que nuestra vida y la de ellos, sea prospera, alegre y feliz.