Luego de recalar en Defensa y Justicia, que fue su primer equipo en nuestro país tras una larga estadía en Europa, el Galgo se sumó a Independiente, y la impresión es que, a su edad, ya no debería planificar un futuro en el exterior.
El futbolista está transitando el último tramo de su carrera, y difícilmente le surja un ofrecimiento ventajoso desde lo económico que justifique volver a alejarse de los afectos. Con tantos partidos jugados en ligas, como la española y la inglesa, en instituciones de elite, como el Mallorca, Deportivo La Coruña y Newcastle, Gutiérrez ya no siente la necesidad de ir a hacer una diferencia económica al extranjero.
Esto, desde luego, facilita la toma de decisiones conjuntas con la modelo, quien anunció recientemente que, finalmente, a fin de año pasarán a ser marido y mujer. “Nos casaremos en diciembre. La decisión ya está tomada. ¿Si vamos a hacer una fiesta? La verdad no lo hablamos. Yo le propuse hacer un asado y listo, pero Jonás no quiso. Quiere una fiesta”, contó la formoseña, quien reconoció que el escenario de una eventual celebración será Buenos Aires y no su provincia, ya que, según argumentó, “hacerlo allá implicaría trasladar a un montón de gente”. Lo cierto es que tras un extenso período de convivencia “itinerante”, pues desde que están juntos compartieron techo en distintas partes del mundo, Maglietti y Jonás protocolizarán su amor ante Dios y ante la ley.
Restará esperar para saber por cuál de las dos alternativas se inclinan los novios: si por armar un mega evento acorde con su popularidad o si, en cambio, compran algunos kilos de entraña y los cocinan con una bolsa carbón. Lo más importante es que construyeron un vínculo en el que, más allá de algún sobresalto, se la juegan para seguir caminando a la par, en principio, por el resto de sus días. Se conocieron mientras Jonás peleaba para superar una enfermedad difícil, y desde entonces no se separaron. Evidentemente hay amor. Y la mejor manera de coronarlo, para ellos, es en el altar.