Dirigentes de Federación Agraria (FAA) de la filial de Crespo mantuvieron una audiencia con autoridades de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) para analizar el conflicto que genera la aplicación de fitosanitarios cerca de escuelas rurales, informó a AIM la presidenta de la organización, Mariela Gallinger, quien apuntó que “la propuesta es trabajar a la par para que escuelas sigan funcionando porque eso significa arraigo, las maestras sigan teniendo su trabajo y los productores rurales puedan seguir produciendo”.
En el encuentro que se realizó en Paraná con autoridades de la Comisión Directiva de Agmer “se pudo intercambiar puntos de vistas sobre un conflicto que atraviesa a la comunidad educativa y a los productores, que es la aplicación de fitosanitarios en zonas rurales”, indicó a esta Agencia Gallinger.
En ese sentido, la dirigente agropecuaria destacó el diálogo: “Es muy importante escucharnos y comenzar a abrir puentes de diálogo y reconocimiento (cada uno con su punto de vista y sus posturas determinadas), porque la sociedad tiene que comprender que podemos hablar para entendernos”.
Al respecto, apuntó que se contó a las autoridades de Agmer “qué implican las restricciones sobre la aplicación de fitosanitarios en zonas rurales y cómo impacta en los pequeños y medianos productores”.
“Acá no hay posiciones radicalizadas, sino que son posturas que se toman desde cada lugar”, remarcó Gallinger, quien consideró que la reunión “fue muy importante ya que se abrió un espacio para seguir conversando”.
El conflicto por la aplicación de fitosanitarios “ya no es económico, sino que se volvió social”, advirtió la dirigente de FAA, quien aclaró que los productores quieren tener escuelas rurales “para los chicos puedan seguir estudiando y se queden en el campo, porque nosotros luchamos por el arraigo rural pero también hay que tener en claro que este tipo de situaciones que obstaculizan el desarrollo de la actividad de los pequeños y medianos productores fomenta la migración, ya que muchos de nuestros hijos ven con escepticismo el trabajo rural por todas las restricciones que limitan la actividad, ya que se suman un conjunto de variables que terminan expulsando a los pequeños chacareros y favoreciendo a la concentración de la tierra en las manos de unos pocos”.
En este conflicto que se ocasionó entre Basta es basta, Agmer y el gobierno de Entre Ríos “nosotros somos los perjudicados, porque no sólo es un problema económico sino que se está generando un problema social que está explicito”, remarcó Gallinger, quien agregó que ese conflicto se explicó a los dirigentes de Agmer para que puedan ponerlo a consideración en los espacios de discusión del sindicato.
“Nosotros vivimos y trabajamos en los campos. Somos los primeros ambientalistas porque queremos cuidar nuestros recursos para nosotros y las generaciones futuras, por lo que acá lo que se debe promover son las buenas prácticas rurales y un control activo del Estado, porque por la mala conducta de algunos pagamos todos”.
Ahora, desde FAA Crespo solicitaron una reunión con integrantes del Foro Ecologista de Paraná: “Estamos hablando por teléfono con el referente del Foro Ecologista de Paraná, Daniel Verzeñassi, para que nos escuchen y sepan, de primera mano, qué es lo que pensamos y puedan dialogar con nosotros, porque la democracia se fortalece con el diálogo y el entendimiento”- concluyó.