La experiencia de las empresas socias del CEER que utilizaron el procedimiento diseñado en conjunto con el sector privado. Un antecedente que puede servir de modelo para otras ciudades.
El primer caso se confirmó el viernes pasado, cuando un empleado de Cartocor dio positivo en el test de COVID-19. Un escenario que la Municipalidad de Paraná estaba esperando y para el que se estaba preparando. Tan pronto la empresa fue notificada del contagio, se activó el protocolo de actuación diseñado por el gobierno local en conjunto con el sector privado. Ese mismo día, la planta volvió a producción. Petropack fue la segunda empresa de la ciudad que utilizó el protocolo. Al igual que Cartocor, unas horas después, retomó la actividad. Solo estuvo frenada durante un turno. “Es un buen antecedente, porque evita que se frene la actividad y porque es el resultado del trabajo mancomunado entre el sector público y el privado. Es un buen modelo a seguir por otras ciudades de la provincia”, destaca Héctor Fratoni, presidente del Consejo Empresario de Entre Ríos (CEER).
La principal preocupación del municipio, explica Pablo Testa, secretario Legal y Administrativo de la Municipalidad, era evitar el cierre de las empresas cuando se confirmara el caso de un trabajador con COVID-19, como ocurrió en otras ciudades. Por ese motivo, el ejecutivo trabajó junto con empresarios de la ciudad en el diseño de un procedimiento simple que define los pasos a seguir en estos casos para que las empresas vuelvan a producción lo más pronto posible. Actualmente solo se utiliza para establecimientos industriales, pero Testa adelanta que está previsto ampliar el alcance a supermercados y pequeños comercios.
El procedimiento define que, cuando se confirma el resultado positivo del test, la empresa debe completar un formulario tipo y enviarlo al correo electrónico nodoepidemiologico@parana.gob.ar, con la documentación adjunta requerida. Se solicita información sobre el evento del contagio, el personal contagiado y los contactos estrechos, las acciones tomadas desde que se detectó el caso sospechoso hasta que se confirmó el contagio y el detalle del procedimiento de sanitización realizado, lo que incluye tanto el nombre del personal o la empresa que realizó las tareas de limpieza como los productos utilizados para hacerlas. El formulario debe estar firmado por el responsable legal y el de higiene y seguridad de la empresa. Además, la compañía debe adjuntar el plan de contingencia y las acciones realizadas, la plantilla de personal contagiado y aislado, el plan de limpieza y desinfección confeccionado por el responsable a cargo y el protocolo COVID-19 de la empresa.
Una vez que la Municipalidad recibe la información, la Dirección de Habilitaciones verifica que se haya completado correctamente y, si es así, devuelve un acta firmada que permite que la empresa vuelva a la actividad una vez finalizado el procedimiento de sanitización.