Francisco exhortó a los 1.300 millones de católicos del planeta a “rezar para que, gracias al compromiso de todos, estos incendios se extingan lo más rápido posible”.
El papa Francisco se declaró “preocupado” este domingo, tras la tradicional oración del Angelus, por los incendios que devastan la selva de la Amazonía, “ese pulmón vital para nuestro planeta”.
“Estamos preocupados por los grandes incendios que se producen en la Amazonía. Este pulmón forestal es vital para nuestro planeta”, dijo el pontífice ante una muchedumbre de fieles congregados en la Plaza de San Pedro.
El papa argentino, que organizará en el otoño boreal una gran conferencia mundial sobre la Amazonía, exhortó a los 1.300 millones de católicos del planeta a “rezar para que, gracias al compromiso de todos, estos incendios se extingan lo más rápido posible”.
Francisco, elegido pontífice en marzo de 2013, se reunió en mayo con el jefe indígena Raoni, que acudió a alertar a Europa sobre la deforestación en la Amazonía.
En su encíclica “Laudato si” (mayo 2015), texto con una tonalidad muy social sobre la ecología, el papa denunció la explotación de la selva amazónica por parte de “enormes intereses económicos internacionales”.
En enero de 2018, el papa Francisco, de 82 años, visitó Puerto Maldonado, una localidad del sudeste del Perú rodeada de jungla amazónica, y adonde convergieron miles de indígenas peruanos, brasileños y bolivianos.
El pontífice fustigó allí “la fuerte presión de grandes intereses económicos que codician el petroleo, el gas, la madera, el oro, los monocultivos agroindustriales”.