El Área de Monitoreo Industrial de la Unión Industrial de Entre Ríos (UIER) elaboró un nuevo Informe de Coyuntura, en el que da cuenta del balance productivo de las empresas de la provincia en 2020. En ese sentido, del relevamiento se concluye que la situación de los establecimientos ha sido muy dispar.
La pandemia fue el evento extraordinario que alternó la dinámica productiva y generó diversas situaciones. Por un lado, algunas empresas consideradas esenciales pudieron registrar un aumento fuerte de su producción y ventas, a la vez que los sectores no esenciales sufrieron contracciones que acumularon importantes dificultades.
En Entre Ríos, según la encuesta realizada por la UIER, el 41% de las industrias consultadas disminuyó su nivel de producción y el 39% sus cantidades vendidas, mientras en el 38% y 43% aumentaron respectivamente dichas variables. Ahora bien, de cara a 2021, las perspectivas para estas dos dimensiones encuentran un núcleo del 30% de industrias que prevén caídas, mientras el 50% espera que se mantengan y 20% que aumenten.
Disparidades
El relevamiento también da cuenta de otras disparidades. Si bien la situación provocó por un lado un impacto menor en los niveles de empleo, con menor cantidad de empresas que los hayan disminuido (9%) y un 31% que los aumentó, por otro lado, este impacto afectó principalmente a las horas trabajadas en las industrias, con un 24% de las mismas que trabajó menos horas y un 39% que las mantuvo.
Estos escenarios se reflejan también en la evaluación de su Situación General de 2020 para la empresa, ya que el 49% lo evaluó como satisfactoria, y el resto se divide entre los que lo evalúan como bueno o malo de forma pareja. En tanto, para 2021, el 57% espera que su situación general sea igual, mientras el 30% espera que sea mejor.
Independientemente de estas diferencias, permanecen muchas dificultades en las industrias y son relativamente comunes a los distintos sectores. Por ello, a la hora de evaluar los principales problemas que las afectan, se resalta la presión impositiva principalmente (81%), y en menor medida el tipo de cambio (49%), la falta de insumos (45%) y el acceso al financiamiento (43%).