Durante el mes pasado, el rubro continuó impulsando los precios. Los próximos meses se verá el impacto, además, de la desregulación de otras variables de la economía
La inflación mensual se mantiene en niveles altos: durante el mes pasado, los precios del rubro de alimentos y bebidas cerraron con un alza del 4,7% promedio, lo que deja un arrastre de 2,1% para febrero, según el relevamiento que realiza semanalmente la consultora LCG.
Según los datos de la consultora, la cuarta semana de enero cerró con una inflación de 1,23% en alimentos y bebidas. El índice de alimentos y bebidas presentó una inflación mensual promedio de 4,7% en las últimas cuatro semanas y 5,5% medida punta a punta en las mismas semanas.
El índice de alimentos y bebidas presentó una inflación mensual promedio de 4,7% en las últimas cuatro semanas
Los alimentos que más subieron en las últimas cuatro semanas fueron carnes (con un alza de 9,1% en promedio) y frutas (8%), por encima del promedio general. En tanto, también registraron subas rubros como comidas listas para llevar (4,2%); productos lácteos y huevos (2,8%); bebidas e infusiones (2,2%); condimentos (2,1%); panificación, cerales y pastas (2,1%); azúcar, miel, dulces y cacao (2%); aceites (1,2%); y verduras (0,6%).
“Alimentos y bebidas subió en enero 4,7%. Más allá de la suba de los combustibles, que fue lo único que se tocó en término de regulados, el resto de los precios está caminando a ese ritmo que, anualizado, lleva a una inflación más alta que el 50% o 55% que tenemos proyectado”, explicó Guido Lorenzo, director de LCG.
“Si sobre eso, se agrega que hay que recomponer tarifas, que los salarios no se actualizaron, que el tipo de cambio todavía está corriendo por detrás de los precios, no es una buena perspectiva hacia adelante. Pero hay que ver cómo evoluciona la respuesta de la política monetaria, que está muy pasiva, y después desde el punto de vista de la Secretaria de Comercio, que es por donde la están tratando de controlar”, agregó el economista.
Alimentos y bebidas subió en enero 4,7 por cien to. Más allá de la suba de los combustibles, que fue lo único que se tocó en término de regulados, el resto de los precios está caminando a ese ritmo que, anualizado, lleva a una inflación más alta que el 50 o 55 por ciento proyectado (Lorenzo)
Según el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), que realiza el Banco Central con los datos de las principales consultoras, este año la inflación cerrará en un 49,8% y el dólar mayorista llegará a $125, un salto de 52 por ciento. El número se ubica muy por encima del 29% de inflación anual que proyectó el Gobierno en el Presupuesto 2021. A mediados de enero, el ministro de Economía, Martín Guzmán, señaló que la idea del Gobierno es “dar estabilidad al tipo de cambio real” para que el dólar y la inflación vayan de la mano durante 2021.
Desde el ministerio de Desarrollo Productivo acaban de establecer una nueva extensión de programa Precios Máximos hasta el 31 de marzo, que continuará con el congelamiento de productos de primera necesidad como alimentos y limpieza. Y en los supermercados debutó el programa de venta de cortes de carne a valor acordado entre los frigoríficos y el Gobierno, que prevé extender un esquema similar a verduras y frutas. INFOBAE