El acto protocolar se llevó a cabo en las instalaciones del Howard Johnson by Wyndham Plaza Hotel Mayorazgo de la capital entrerriana, donde se hizo presente el plantel Albiceleste, encabezado por su capitán, Mariano Montero. Además, participaron Fabián Medina (Director Comité Organizador del certamen), Javier Martínez (Secretario de Confederación Argentina de Softbol y Jefe equipo de la Selección Argentina), Andrés Gamarci (presidente de la Asociación Paranaense de Softbol), Michael Ibarguen (Vicepresidente de la Federación Cubana), Leonardo Cardenas (DT Selección de Cuba), Liliana Guzmán (Subsecretaria Deportes Municipalidad de Paraná) y José Gómez (Secretario Deportes Provincia de Entre Ríos).
Apunta a lo más alto
Federico Eder, uno de los históricos del softbol argentino, habló con Mirador Entre Ríos y se refirió a la competencia que se avecina, asegurando que “el título del mundo nos da una cierta obligación de tener que ganar este torneo, pero nosotros vamos partido a partido, dando siempre el ciento por ciento y tratando de mejorar siempre. Sabemos que dejando todo, los buenos resultados llegarán solos. Cada torneo tiene sus dificultades, pero apuntamos a terminar en lo más alto del podio”.
Desde la primera edición, en 1981, Argentina no ha podido consagrarse en este certamen, por lo que el segunda base considera que “es una cuenta pendiente que tiene el equipo, porque sería coronarnos con nuestra gente, en nuestro estadio, donde muchos de nosotros empezamos a jugar y vimos jugar a nuestra familia. Llegar a este torneo luego de haber sido campeones del Mundo y de los Juegos Panamericanos es una excelente oportunidad para volver a coronar este ciclo”.
Consultado sobre cómo cambió la mirada del mundo del softbol hacia la selección argentina tras la consagración del 2019, sostuvo que “antes veníamos haciendo un muy buen trabajo en los Mundiales y no podíamos superar el cuarto puesto, pero lo logrado en 2019 significó un quiebre para nosotros en el deporte. El mundo del softbol nos mira de otra manera y nos dio el lugar que nos merecíamos”.
Por último, Eder se refirió al legado que su generación le está dejando a las nuevas camadas que tendrán la responsabilidad de sucederlos en el futuro: “Si bien se venía trabajando muy bien desde hace muchos años, nosotros pudimos dar el gran salto logrando estos títulos. Las consagraciones permitieron que el softbol crezca en todo el país, gracias a la visualización que tuvo. Ojalá siga creciendo porque hay muchos chicos jóvenes de muy buen nivel. Hoy se trabaja con las selecciones sub 18 y sub 23. Hay muy buen material para afrontar el recambio que, por una cuestión lógica, tarde o temprano se dará”.
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