ACTO 25 DE MAYO
Viva La Patria – 210 años de Libertad
El Presidente Municipal Dr. Gerardo Heberlein llevó a cabo el Izamiento de la Bandera, como homenaje por el Día de la Patria.
Estuvieron presentes también el Jefe de la Comisaría de Seguí Crio. Campins Juan Marcelo, personal del Hospital Lister Lic. Gabriela Gareis y personal de Bomberos Voluntarios Seguí Flavia Reyas.
Hoy nos toca conmemorar este día de una manera diferente, pero continuemos estando unidos desde nuestros hogares, cuidándonos entre todos porque “un gran país solo se logra con un pueblo unido”.
Revolución de Mayo
Mientras el rey Fernando VII continúa en prisión tras la invasión napoleónica sobre la península ibérica, una Junta Suprema surge en España con el fin de gobernar en nombre del rey. En un principio las colonias americanas respetarán este poder, pero cuando la crisis se profundice y los criollos no se sientan representados en las nuevas juntas, romperán lazos con el gobierno transitorio.
Hacia 1809, Buenos Aires era ya una ciudad de peso dentro de las colonias españolas. Poseedora de un puerto clave para el comercio ultramarino, había resistido, además, y prácticamente sin ayuda de su metrópolis, dos invasiones inglesas. Tras dichos sucesos, la milicia, de origen principalmente americano, se había transformado en un sector de influencia dentro del escenario político y era el apoyo principal de los criollos capitulares, aquellos que componían el cabildo.
Tras la invasión francesa sobre España, el gobernador de Montevideo Francisco Javier Elío, había llamado a la conformación de una Junta de Gobierno local para proteger los intereses españoles en dicha ciudad, acusando de traidor al Virrey del Virreinato del Río de La Plata, Santiago de Liniers por su origen francés pero, principalmente, por el poder que el respaldo de las milicias le daban a éste. Ante esta situación de inminente crisis, la Junta Suprema de Sevilla envió a Baltasar Hidalgo de Cisneros en reemplazo de Liniers, quien disuelve la Junta de Gobierno de Elío y ocupa su cargo hacia el mes de julio de 1809.
Sin embargo su gestión nada pudo hacer para evitar la crisis de representatividad que como en el resto de las colonias americanas, habría de estallar en Buenos Aires. Aunque en un principio los criollos juraron fidelidad a la junta conformada para gobernar en nombre de Fernando VII, no tardaron en comprender que las desigualdades entre peninsulares y americanos continuaban profundizándose. La limitada participación que las juntas de España otorgaron a los americanos agudizó los viejos conflictos y acentuó la crisis del orden colonial. Peor aún, la caída de la Junta de Sevilla en manos del ejército francés y la conformación en España de un Consejo de Regencia en Cádiz sustituyendo a la caída junta, desataron una crisis de legitimidad en todos los territorios coloniales.
En 1810 llegaron a Buenos Aires las noticias de la caída de la Junta de Sevilla y los criollos exigieron al Virrey el llamado a Cabildo Abierto dando inicio a la que hoy se conoce como la Semana de Mayo. Principalmente lo que se debatiría en el Cabildo sería la legitimidad de la autoridad de Cisneros, ya que el órgano que lo había designado en sus funciones había dejado ya de existir, y más aún, el rey continuaba preso a manos de Napoleón Bonaparte. Finalmente el 25 de Mayo el Virrey sería destituido y en su lugar se conformaría la Primera Junta de Gobierno.
Cabe destacar que la llamada oficialmente Junta Provisional Gubernativa de las Provincias del Río de la Plata a nombre del Señor Don Fernando VII, como su nombre bien lo indica, no planteó en primera instancia deseo alguno de cortar su vínculo con la metrópoli ni planteaba la independencia de España. La Primera Junta es, si bien predecesora del movimiento patriota, en primera instancia reivindicadora de los derechos de representatividad de los que los americanos se sentían privados. Surge para reclamar autonomía y desvincularse de los frágiles gobiernos que se suceden dentro de la península en nombre del monarca español, pero no aún para abolir el orden preexistente. Hasta la incorporación de los diputados del Interior y su posterior disolución, la Primera Junta estará integrada por Cornelio Saavedra jefe del regimiento de patricios como presidente, Juan José Castelli, Manuel Belgrano, Miguel de Azcuénaga, Manuel Alberti, Domingo Matheu y Juan Larrea como vocales y Juan José Paso y Mariano Moreno como secretarios. Su principal función será la de sumar a la causa revolucionaria a las provincias del Interior y resistir los contra ataques realistas.