Además de la trilla en Estados Unidos, según explica el analista Esteban Moscariello las mejores condiciones climáticas en Rusia han llevado a aumentar su proyección de cosecha, y el ministro de agricultura ruso ha confirmado que las heladas no han afectado significativamente la producción.
“La presión de la cosecha global ha pesado sobre los futuros. La UE, Ucrania y Rusia están bajando los precios de exportación para encontrar demanda, lo que también ofrece resistencia a los futuros. Algunos siguen siendo optimistas sobre los precios del trigo a largo plazo debido a la caída de 20 millones de toneladas en las cosechas de la UE y Rusia”, explicó Moscariello a Clarín.
Hace menos de un mes, precisamente el 27 de mayo, el precio del trigo diciembre 2024 en Chicago alcanzó un pico de 278 dólares por tonelada, pero desde entonces no dejó de caer.
Por su parte el maíz también enfrenta una tendencia a la baja. Moscariello explica que el mercado del cereal está influenciado por una combinación de factores, incluyendo las exportaciones, la producción de etanol, las condiciones climáticas y las políticas comerciales internacionales. Esta semana, detalla, será decisiva para el mercado de maíz, con importantes informes del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) que podrían influir significativamente en el comportamiento del mercado.